El día 7 de mayo a las 10 de la noche casi toda España estará paralizada. Todos los bares con televisión estarán llenos; el partido lo darán en abierto por La Sexta pero eso da igual, lo importante es no verlo en casa. Y es que en todos los clásicos pasa lo mismo. Los nervios se apoderan del ambiente y en todos los bares se fuma, da igual si está prohibido o no. La gente se fuma hasta los carteles de "prohibido fumar", está el que incluso se fuma al camarero o al tío que tiene al lado:
- Perdona, ¿tienes mechero?
- Sí, aquí tienes.
- No, no. Ves quemandote el pelo si eso.
Además todo el mundo fuma, hasta los no fumadores:
- ¿Tú no fumas Jacinto?
- Que va tío, odio el tabaco
- ¿Y porque tienes un cigarro en la boca encendido?
Todos acababan fumando inconscientemente.
Ese día también es el día de los bocadillos. Todos cenan bocadillo. El camarero no pregunta que quieres tomar, te pregunta directamente de que quieres el bocadillo. Si no comes bocadillo eres el extraño del bar, así que es obligatorio y después un cigarrito. Para beber, pobre de ti como pidas agua:
- ¿Que quieres de beber?
- Agua, por favor
- ¿Estrella o Cruzcampo?
En Cataluña en cuanto marca el Madrid en los bares siempre se oye un timido: "gol...". Pobre del que chille más de la cuenta, que sale del bar en calzoncillos. En cambio cuando marca el Barça, todos chillan "GOOOOOL!" y se abrazan entre todos, bailan la conga,...
Hay un tío con pasamontañas que abraza a toda la gente, aunque no sea gol, así aprobecha a ver si pilla alguna que otra cartera.
- ¿Qué haces tío? ¿Porque me abrazas? No serás...
- No, no. Estoy celebrando el saque de banda.
- A vale.
- Jijijiji
En el bar aparte del chico del pasamontañas siempre está el empanaete, que va al bar por no estar solo en casa. Es fácil de reconocer, en todos los bares hay alguno: el que lleva la camiseta de un equipo de segunda B y se sienta detrás de la maceta que le tapa la televisión.
Lo que no cambia nunca en los bares, haya partido o no, son los lavabos. Aparte de lo limpios que siempre están nunca hay papel. Tú ves a la gente entrar y salir de el como si nada, pero nadie se queja de que no hay papel. Quizás lo tiene el chico del pasamontañas.
- Perdona, ¿tienes mechero?
- Sí, aquí tienes.
- No, no. Ves quemandote el pelo si eso.
Además todo el mundo fuma, hasta los no fumadores:
- ¿Tú no fumas Jacinto?
- Que va tío, odio el tabaco
- ¿Y porque tienes un cigarro en la boca encendido?
Todos acababan fumando inconscientemente.
Ese día también es el día de los bocadillos. Todos cenan bocadillo. El camarero no pregunta que quieres tomar, te pregunta directamente de que quieres el bocadillo. Si no comes bocadillo eres el extraño del bar, así que es obligatorio y después un cigarrito. Para beber, pobre de ti como pidas agua:
- ¿Que quieres de beber?
- Agua, por favor
- ¿Estrella o Cruzcampo?
En Cataluña en cuanto marca el Madrid en los bares siempre se oye un timido: "gol...". Pobre del que chille más de la cuenta, que sale del bar en calzoncillos. En cambio cuando marca el Barça, todos chillan "GOOOOOL!" y se abrazan entre todos, bailan la conga,...
Hay un tío con pasamontañas que abraza a toda la gente, aunque no sea gol, así aprobecha a ver si pilla alguna que otra cartera.
- ¿Qué haces tío? ¿Porque me abrazas? No serás...
- No, no. Estoy celebrando el saque de banda.
- A vale.
- Jijijiji
En el bar aparte del chico del pasamontañas siempre está el empanaete, que va al bar por no estar solo en casa. Es fácil de reconocer, en todos los bares hay alguno: el que lleva la camiseta de un equipo de segunda B y se sienta detrás de la maceta que le tapa la televisión.
Lo que no cambia nunca en los bares, haya partido o no, son los lavabos. Aparte de lo limpios que siempre están nunca hay papel. Tú ves a la gente entrar y salir de el como si nada, pero nadie se queja de que no hay papel. Quizás lo tiene el chico del pasamontañas.